Cómo limpiar joyas de oro y brillantes sin dañarlas

Judith Durán
Judith Durán

Si tienes joyas de oro y quieres que mantengan siempre su color y brillo, lo mejor que puedes hacer es limpiarlas cada cierto tiempo para que todo esté correcto. A lo largo de este artículo te vamos a mostrar diferentes consejos para que puedas conseguir que la joya brille como el primer día. 

Si usas las joyas de oro en tu día a día como las que podemos encontrar en el catálogo de MimíKokó, podrás darte cuenta de que su mantenimiento es sencillo. Lo importante es que la joya de oro sea de calidad. Si la joya no es buena, entonces irá perdiendo el color y eso hará que rápidamente se ponga fea. No te la juegues y apuesta siempre por joyas de oro puro para que te puedan durar toda la vida. 

Dicho esto, queremos dejar claro que, dependiendo del tipo de oro de la joya, el mantenimiento y la limpieza serán unos u otros.  

Limpiar joyas de oro amarillo 

Son las joyas más comunes y las que primero se nos vienen a la cabeza cuando hablamos de joyas de oro y brillantes. Normalmente se suele optar por las joyas de oro de 18 quilates por su resistencia, aunque en ocasiones las de 24 quilates pueden ser una buena opción.  

Uno de los principales motivos por los que se recomienda este tipo de joya es porque no se pone negro, lo que hace que mantener su brillo resulte realmente fácil como nos indican desde MimíKokó.  

Pero como todo en la vida, el uso hace que la joya se ensucie. Para mantener una buena higiene y aspecto se suele recomendar con un paño mojado en agua y un poco de amoniaco. También existen bayetas especiales para limpiar con facilidad las joyas de oro amarillo. 

En el supuesto de que el oro esté rallado, entonces lo que deberás hacer es acudir a la joyería. En su taller harán un pulido de la joya y así volverás a disfrutar del aspecto original de la misma. 

Limpiar joyas de oro blanco 

Es verdad que no es oro puro, sino que es una aleación, pero el oro blanco también se suele usar mucho en el mundo de la joyería. Es un tipo de oro que ofrece mucha elegancia. 

El oro blanco se obtiene a través de una aleación con níquel, platino, plata o paladio. Eso hace que el color tienda a ser blanco y la joya tenga un aspecto diferente.  

Al ser una joya de aleación, el oro no es puro. Eso significa que estas joyas con el paso del tiempo sí que pueden perder el brillo original. Y para recuperarlo es necesario limpiarlas correctamente. En este caso hay que añadir una capa de rodio y eso solo se puede hacer en un taller de joyería. Es decir, para recuperar el brillo inicial tendrás que acudir a un profesional. Con una limpieza convencional no podrás conseguirlo. 

Limpiar joyas de oro rosa 

A pesar de ser menos popular en el mundo de las joyas, tenemos que decir que también hay joyas de este material. De nuevo hablamos de una aleación elaborada con oro de 24 quilates, plata y cobre. Por ese motivo coge ese color rosado.  

Como sucede con el oro blanco, no podrás limpiar la joya para recuperar su brillo original. La única opción que tenemos es llevarla a la joyería. Allí le darán un pulido especial que hará que la joya vuelva a recuperar el color inicial.  

¿Cómo puedo limpiar el oro? 

Como te vamos a mostrar a continuación hay diferentes remedios caseros para limpiar el oro amarillo correctamente. Como hemos comentado, las otras dos opciones de oro solo permiten recuperar el color y el brillo inicial si llevamos la joya a la joyería.  

1- Limpieza del oro con agua y jabón 

Se puede decir que es el remedio más sencillo, pero también el más usado. Para realizar la limpieza siempre deberás usar jabón neutro para conseguir el resultado esperado.  

Para realizar la limpieza tendrás que llenar un recipiente con agua templada y luego añadir un poco de detergente. Posteriormente deberás mezclar todo. 

Cuando el jabón esté bien disuelto será el momento de introducir la joya de oro. Deberás dejarla en su interior un cuarto de hora. No más tiempo o la pieza comenzará a sufrir.  

Con la ayuda de un cepillo de dientes suave tendrás que comenzar a frotar con movimientos circulares. Esto solo será necesario si la joya está muy sucia y la suciedad no sale con el agua directamente.  

Finalmente tendrás que enjuagar con agua caliente y secar correctamente con un paño que no deje pelusas. En el caso de querer obtener más brillo, seca con el paño haciendo movimientos circulares.  

2- Limpieza del oro con vinagre 

Aunque pocas personas lo saben, el vinagre se presenta como un ingrediente muy interesante a la hora de limpiar cualquier joya de oro. Sobre todo es útil para limpiar el oro que ha cogido un color negro como el oro blanco o rosa.  

En un recipiente ponemos dos cucharaditas de agua por cada tres de bicarbonato.  

Mezcla todo hasta conseguir una pasta. Cuando tengas la pasta tendrás que aplicarla sobre la joya con la ayuda de un algodón. Asegúrate de que cubres bien toda la joya. 

Pon la joya en un recipiente y añade vinagre blanco hasta cubrirla. Deja reposar durante unos cinco minutos.  

Finalmente deberás enjuagar la joya y secar con un paño suave. Verás como la joya queda limpia y en consecuencia el color negro ha desaparecido.  

3- Limpieza del oro con bicarbonato 

El bicarbonato con agua suele dar muy buenos resultados a la hora de realizar la limpieza de una joya de oro. No solo da buenos resultados con las joyas de oro amarillo, también con las de color blanco y rosa.  

Cogemos un recipiente y lo forramos con papel de aluminio. El objetivo es que el aluminio ayude con la labor de limpieza. 

Ponemos en su interior la joya y por encima espolvoreamos con bicarbonato. Hay que tapar la joya para que pueda hacer su trabajo. 

Posteriormente añadimos agua hirviendo y la ponemos sobre la joya. Dejamos el agua caliente durante cinco minutos. 

Pasado el tiempo recomendado sacamos del agua y pasamos a cepillar con un cepillo de dientes suave. Finalmente enjuagamos con agua fría y secamos. El resultado también será muy bueno a la hora de recuperar el brillo.