Cómo limpiar una impresora de etiquetas

Judith Durán
Judith Durán

¿La duración y buen funcionamiento de tu impresora de etiquetas depende de la calidad de los consumibles que utilices? Sí, pero no solo eso. Para asegurarte de que tu impresora de etiquetas siga funcionando como el primer día durante mucho más tiempo, es clave mantenerla limpia con cuidados regulares para mantenerla perfecta.

Para ayudarte te vamos a compartir algunos consejos prácticos para limpiar y cuidar tu impresora de etiquetas y prolongar su vida útil.

¿Qué productos usar para no dañarla?

Te dejo una guía rápida sobre qué productos podemos usar para limpiar una impresora de etiquetas sin dañarla lo más mínimo. Está basada en las recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). 

  • Lejía doméstica diluida: Mezcla 5 cucharadas (que viene siendo 1/3 de taza) de lejía con cada galón de agua. Esta solución es efectiva y económica.
  • Soluciones de alcohol al 70%: Asegúrate de que el alcohol tenga al menos un 70% de concentración. Es genial porque se evapora rápido y no deja residuos pegajosos.
  • Desinfectantes comunes registrados por la EPA: Estos son productos que ya vienen listos para usar y han sido aprobados por la Agencia de Protección Ambiental (EPA) por su eficacia contra virus y bacterias.

¿Qué partes de la impresora de etiquetas hay que limpiar?

Veamos las partes más importantes que tenemos que limpiar y la regularidad con la que hacerlo. Hablaremos de los sensores, el cabezal de impresión, los rodillos, y otras áreas por las que pasa el papel y la cinta (fuente: BarcodeCenter.shop)

Sensores de papel y cinta: Una solución rápida y efectiva es usar aire comprimido para eliminar el polvo o cualquier partícula pequeña que pueda estar interfiriendo con su funcionamiento.

Cabezal de impresión y rodillos: Estas partes son clave para obtener impresiones de calidad. Para limpiarlas, necesitas un solvente. Aunque hay productos específicamente diseñados para esta tarea, una alternativa es usar un hisopo o un paño suave empapado en alcohol isopropílico al 99,7%. Esto despejará cualquier residuo sin dañar los componentes. 

Recuerda, siempre realiza esta limpieza con la impresora apagada y asegúrate de que el cabezal esté frío.

Módulo del cortador: Este componente, crucial cuando trabajas con papel continuo sensible a la presión, también necesita atención. Límpialo con un solvente adecuado después de cada rollo de papel para mantenerlo en condiciones óptimas. 

Si utilizas el cortador para rótulos o papel protector, combina el uso de aire comprimido con el solvente para asegurar una limpieza profunda cada dos o tres rollos.

Barra para cortar manualmente o despegar: Un poco de solvente y una limpieza mensual son suficientes para mantener esta parte en buenas condiciones.

Sensor de toma de etiquetas: Para esta área, un soplido de aire cada seis meses es más que suficiente para mantenerlo libre de obstrucciones y funcionando correctamente.

La he limpiado y no funciona bien, ¿qué puede pasar?

Si después de realizar una limpieza minuciosa tu impresora de etiquetas sigue sin funcionar correctamente, aquí tienes algunos pasos que puedes seguir para intentar solucionar el problema:

Revisa las conexiones: Asegúrate de que la impresora esté correctamente conectada a la fuente de alimentación y a la computadora o red. A veces, un cable suelto o dañado puede ser el culpable.

Comprueba la configuración y el software: Verifica que el software de la impresora esté actualizado y que la configuración sea la correcta para el tipo de trabajo de impresión que estás intentando realizar. Asegúrate de que no haya conflictos con el software o el sistema operativo.

Buscas restos de la limpieza: Después de la limpieza, realiza una inspección visual para asegurarte de que no haya quedado papel atascado, residuos de etiquetas, o cualquier otro objeto extraño en el mecanismo de la impresora.

Reinicia la impresora: Un reinicio puede solucionar muchos problemas. Apaga la impresora, espera unos momentos, y luego enciéndela de nuevo para ver si el problema se resuelve.

Utiliza la función de autodiagnóstico: Algunas impresoras tienen una función de autodiagnóstico que puedes ejecutar para identificar el problema. Consulta el manual de tu impresora para saber cómo acceder a esta función.